La empresa maderera Arboriente S. A. de madera triplex, se encuentra en la ciudad de Puyo donde emite diariamente gases tóxicos al ambiente producto de ello los habitantes que viven alrededor de la planta de triplex viven enfermos y existen algunos casos incluso de cáncer.
La deforestación en la provincia de Esmeraldas, se ha convertido en el principal problema forestal del país con posibilidades de generar una explosión social.
Esta provincia ha perdido su manto boscoso de 1.500.000 Ha en 1980 a un estimado de apenas 250.000 Ha al momento actual.
El proceso de deforestación se desencadena a partir de la llegada de la época del banano en 1948 y que dura hasta 1967. Desde 1967 entra en la zona la empresa CODESA y PLAYWOOD que hacen una despiadada deforestación, seguida más tarde por las empresas BOTROSA-PEÑA DURINI Y ARBORIENTE.
Este proceso se acompañó de la expansión terrateniente de ganaderos especialmente en la zonas de Esmeraldas, Muisne, Quinde y Eloy Alfaro y la expulsión hacia la montaña de los pequeños agricultores y por los fenómenos migratorios desde zonas devastadas por la deforestación y la agricultura a base de tala y quema, como Loja y Manabí. Esta expansión terrateniente de produjo por el crecimiento vial de la provincia y luego desde las carreteras asfaltadas se ha producido la expansión de las plantaciones de palma africana, las camaroneras y ahora de las plantaciones de eucalipto.
Pero la demanda de madera dentro y fuera del país, las herramientas fabricadas para talar el bosque y la galopante miseria o empobrecimiento de las poblaciones rurales en el Ecuador y el tercer mundo se han compaginado para producir una marea humana de taladores frenéticos descontrolados de los bosques y un océano de corrupción, por el dinero rápido que les llega tras la muerte de un árbol y la ocupación agresiva de un pedazo de tierra.
Este desenfreno no sólo que reducen la capacidad del planeta de frenar el impacto del efecto invernadero por la emanación de CO2 y la reducción de producción de oxígeno, sino que el agua pura que antes se producía y retenía en los bosques tropicales, escapa a la atmósfera y se condensa en los lugares templados o próximos al polo donde el invierno anualmente se presenta, produciendo en esos lugares mayor enfriamiento y luego grandes inundaciones que barren con su tierra fértil, su infraestructura y sus medios de desarrollo en tanto en los trópicos las sequías se prolongan y los lluvias desproporcionas también barren con la fertilidad del suelo.
Pero para las empresas madereras su interés se reduce a la perpetuación del negocio, y creen que la solución es la reforestación con especies exóticas como teca y eucalipto y nativas, a costa de la pérdida de la memoria biológica contenida en el bosque húmedo tropical y en el bosque nublado, en el que residen no solo árboles económicamente rentables.
En los actuales momentos en que la genética ha pasado a ser la ciencia dominante del futuro de la humanidad, los bancos vivos de información genética tienen un valor incalculable porque de ellos depende el desarrollo humano dentro y fuera del planeta.
Los países que desarrollaron la agricultura, localizados por sobre todo en las zonas templadas del planeta, depredaron casi todas las formas de vida que no respondían a un interés económico, con lo cual perdieron una información genética, que los hace dependientes de lo que hoy poseen los océanos, las regiones no agrícolas, y por sobre todo los trópicos que aún conservan la memoria genética viva.
Actualmente el planta asiste a la sexta ola de destrucción de la vida. La Quita la destrucción de la vida en el planeta fue por causa de un meteoro que hace sesenta millones de años aproximadamente terminó con el dominio de los dinosaurios en el planeta y generó una glaciación que afecto por sobre todo a los polos y zonas templadas extinguiendo cuanto fue sensible a este cambio climático.
Hoy la destrucción de la vida en el planeta, es producida por los seres humanos y produce la desaparición de centenares de especies por día de manera irreversible. En este proceso los países desarrollados son los responsables y han generado una ola de imitación a sus fórmulas de desarrollo con el consecuente, deforestación, monocultivos, consumo, producción y contaminación, que de continuar amenaza la propia vida de nuestra la especie.
Europa, desde su sociedad científica, es consciente de la responsabilidad que sobre ella recae al proponer un modelo agrícola, comercial e industrial de desarrollo humano que si bien ha generado una expansión del saber y el poder humano, ha cambiado el clima y generado una sociedad que demanda recursos, que de seguir el curso que lleva, traerá consecuencias irremediables.
Ante esta situación la Comunidad Europea busca alternativas que frenen la deforestación en la costa húmeda del Ecuador y en el bosque nublado vinculado a ella, que son de los últimos reductos en la costa del Pacífico Sudamericana, por lo cual nos invita a proponer y ejecutar alternativas viables en Esmeraldas, Carchi e Imbabura. Esta iniciativa está también amparada en el cumplimiento del TRATADO DE KIOTO suscrito por estos países y el nuestro que obliga a los países del mundo a pagar cada metro cúbico de oxígeno que consumen con la producción O2 o con dinero para proteger las fuentes de oxígeno del planeta a partir del año 2008.
Esmeraldas ha visto el desarrollo de las plantaciones, el paso del petróleo y el desarrollo del turismo sin que los recursos económicos y la ocupación del su espacio genere empleo real para su población, se ha tratado de explotar hasta su agotamiento de lo que es su trabajo humano y natural, finalmente las ganancias producidas ha enriquecido más gente de las ciudades de Quito y Guayaquil, empresas extranjeras y a una burocracia parásita y corrupta, en tanto Esmeraldas ha pasado a ser la provincia con más problemas y pobreza del Ecuador, que vive en un ambiente de euforia cuando llega algún boom económico, tras el cual se retuerce en su resaca.
Hoy el dinero fácil y rápido viene de madera.
TOMADO DE ECOTRACKERS
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